
¿Alergia estacional los 12 meses del año?
Más de 8 millones de españoles estornudan a diario sin saber que la tienen.
27/11/2016
Aunque existen meses de mayor incidencia alérgica, lo cierto es que la alergia estacional hace que podamos sufrir alguno de los síntomas en cualquier época del año. Solo un 10% de las personas alérgicas lo son al polen generado por las plantas que florecen en primavera; el resto de los más de 8 millones de españoles que sufren tos, estornudos, sensación de nariz tapada, lagrimeo o asma, lo sufren en otras épocas del año y no solo en primavera.
¿Qué es la alergia estacional?
La alergia estacional, también conocida como fiebre del heno o rinitis alérgica estacional, es una reacción del sistema inmunitario a una sustancia que el cuerpo detecta como invasor. Ocurre en épocas del año determinadas y el desencadenante de este proceso es un alérgeno, haciendo que el sistema inmune se defienda creando anticuerpos y produciendo histaminas. Estas, causan síntomas como el estornudo repetido, la quemazón ocular y los ojos llorosos. Generalmente, esto ocurre cuando las plantas (ya sean árboles, arbustos o hierbas) liberan partículas de polen para fecundar otras plantas.
Puede ocurrir en cualquier época del año, produciendo, año tras año, los mismos síntomas.
- Primavera
Es el polen, al entrar en contacto con el organismo, el principal causante de la alergia primaveral. Cuando tiene lugar el proceso de polinización, este alérgeno pasa de una flor a otra, bien transportado por algún tipo de insecto, o a través del aire, proporcionando así la alergia del polen.
Existen dos tipos de factores determinantes, que influyen directamente en la cantidad de polen que se encuentre en suspensión, y por lo tanto de que se produzca una mayor o menor incidencia de alergia en la población:
1. Lluvia
El principal condicionante de este factor es la cantidad de lluvia que se registre durante los meses de otoño e invierno, pues una cifra elevada dará lugar a que las plantas se desarrollen más, y que de esta forma suelten una mayor cantidad de polen durante la primavera, haciendo que las personas alérgicas al polen sufran más sus síntomas.
2. Las plantas según la zona geográfica
No todas las plantas portadoras de polen crecen en los mismos lugares, por lo tanto influirá la zona geográfica en la que te encuentres.
Las plantas encargadas de producir polen en esta época del año son, generalmente, árboles como el roble, el olmo, el arce, el aliso, el abedul, el enebro y el olivo.
- Verano
En el período estival, el polen suele provenir de flores pequeñas como las gramíneas (como la bermuda, el felo, la grama dulce y la hierba de jhonson) y las malezas (como el cardo ruso y el plátano inglés).
La alergia al polen en esta época del año produce congestión ocular y nasal con un intenso lagrimeo o conjuntivitis, picor en los ojos y nariz, estornudos frecuentes y crisis de asma bronquial.
- Otoño e invierno
Durante estos meses, con la llegada de las bajas temperaturas y las lluvias, también se pueden sufrir alergias, pero esta vez de tipo respiratorias. La humedad y la presencia de materia orgánica en el ambiente, propicia el nacimiento de mohos y ácaros, alérgenos causantes de la aparición de problemas respiratorios y picor en los ojos.
Pero el polen también está presente durante el otoño y el invierno, sobre todo a finales de enero y febrero y principios de marzo, pues son los meses en los que se producen más alergias de invierno provocadas por los pólenes de cupresáceas, presentes en los cipreses y arizónicas.
Síntomas de la alergia estacional
Las alergias estacionales suelen presentar picor en la nariz, en el paladar, en la parte posterior de la garganta y en los ojos. Este escozor puede comenzar de forma gradual o repentina, haciendo que posteriormente se desencadenen síntomas como secreción acuosa y transparente en la nariz, ojos llorosos, tos, sibilancias e irritabilidad. Los colirios se convierten muchas veces en algo imprescindible para el día a día. El hecho de que se produzca una congestión puede dar lugar a cefaleas, y en ocasiones a infecciones como sinusitis. Además, algunas personas pierden el apetito y tienen dificultad para conciliar el sueño.
Alergia estacional: tratamiento
Según el Dr. David González de Olano, la opción más eficaz para tratar las alergias estacionales es la inmunoterapia alergénica, una vacuna con alergénicos que se complementa con otros medicamentos encargados de aliviar los síntomas, como colirios para los ojos o determinados antihistamínicos.
Esta vacuna evita, en primer lugar, que la alergia se agrave, impidiendo que la rinitis alérgica pueda derivar en una crisis de asma.
Por otro lado, la inmunoterapia también ayuda a que la alergia no se complique con la aparición de nuevas alergias a otras sustancias.
¿Cómo funciona?
Antes de que el paciente pueda someterse a este tratamiento, deberá hacerse pruebas cutáneas, así como análisis de sangre, para determinar el tipo de alérgenos que le está causando la alergia.
Una vez averiguado y clasificados, se procede a suministrar la vacuna, siendo ésta un pequeño extracto del alérgeno al que se es alérgico. De este modo, el objetivo es acostumbrar al organismo a convivir con la presencia de ese alérgeno, responsable de los síntomas de la alergia.
Recuerda lo importante que es llevar este proceso siempre bajo la supervisión de tu alergólogo para conseguir resultados eficaces, y así evitar cometer errores que haga retrasar el tratamiento.
Por ello, si padeces alguno de los síntomas citados anteriormente, o te sientes identificado con alguno de los puntos tratados, visita a un especialista para que estudie tu caso y pueda diagnosticarte el tratamiento más adecuado a tu problema.