
¿Qué son las emociones?
Las emociones son poderosas y pueden ser positivas o negativas. Pueden hacer que nos comportemos de cierta manera y también pueden llegar a generar conflictos.
21/10/2022
Para tener una vida sana y feliz, es importante saber controlar nuestras propias emociones, ya que estas son la raíz de la vida humana. Las podemos encontrar de forma positivas o negativas, dependiendo de la situación, pero si algo tenemos que tener claro es que no debemos ignorarlas, sino, tratar de encontrar la forma de gestionarlas.
Para poder manejar nuestras emociones, es necesario que consigamos entender qué son y cómo nos afectan, tanto a nosotros como a las personas que se encuentran a nuestro alrededor. Una vez que sabemos esto, será mucho más fácil desarrollar un plan de acción sobre cómo usarlas de la manera más beneficiosa. A continuación, te contamos qué son las emociones y una serie de técnicas para mejorarlas.
¿Qué son las emociones?
Las emociones hacen referencia a un amplio conjunto de estados mentales que van desde la alegría, la tristeza y la ira, hasta emociones más complejas que suelen asociarse, típicamente, con una respuesta física, una expresión facial expresiva y una reacción fisiológica.
Las podemos clasificar de muchas maneras diferentes: por su función como puede ser el placer o el dolor, por su ubicación física, tanto en el cerebro o en el estómago, o por su intensidad, de forma leve o fuerte…
Las emociones son el motor de nuestras vidas y hacen que podamos sentirnos vivos y que valga la pena vivir la vida.
Tendemos a creer que las emociones no son controlables, pero en realidad, esto no es así. Podemos utilizar un sin fin de técnicas para manejarlas.
Técnicas para mejorar nuestras emociones
1. Momentos que hay que evitar y afrontar emocionalmente
Las emociones son poderosas y pueden ser positivas o negativas. Pueden hacer que nos comportemos de cierta manera y también pueden llegar a generar conflictos.
No hay un conjunto de reglas que determine cómo debemos lidiar con las emociones, pero hay algunas situaciones en las que debemos evitar combatir con ellas. Algunos ejemplos claros y que nos encontramos en nuestro día a día, pueden ser por ejemplo: una conversación con alguien que tiene un punto de vista diferente al nuestro o una discusión con nuestra pareja sobre algo que no importa mucho, como qué programa de televisión ver juntos esa noche. En estas situaciones, siempre se puede llegar a un acuerdo y evitar por tanto una serie de conflictos.
Por otro lado, hay ciertos momentos en los que es necesario enfrentarse a nuestros miedos para poder superarlos, como pueden ser: una exposición en público o nuestra primera entrevista de trabajo.
2. Lleva tu atención a otro lugar
La capacidad de manejar nuestras emociones puede ser la diferencia entre el éxito y el fracaso.
Es importante saber que tenemos control total sobre lo que sentimos. Podemos elegir si queremos o no estar felices, tristes, enfadados... hay momentos donde nuestros pensamientos pueden jugarnos malas pasadas, alimentar el miedo o ponernos en situaciones de tensión: mi hija ha salido esta noche, seguro que le va a pasar algo malo. Una solución es tratar de dirigir la atención hacia otro lado y evitar en la medida de lo posible estos pensamientos.
3. Enfócate en ti y en el momento presente
Es importante que aprendamos a centrarnos en el presente y a gestionar nuestras emociones centrándonos en nuestra visión personal y dejando a un lado todo lo que hace el resto, ya que esto nos ayudará a que cuidemos de nuestra salud mental.
Es recomendado por muchos profesionales la realización de yoga u otras formas de ejercicio que serán beneficiosas y nos ayudarán a enfocarnos en nosotros mismos, relajarnos y liberar tensiones del cuerpo.
4. Mejora tu autocontrol basándote en el futuro inmediato
Todos tenemos una tendencia a pensar demasiado en el futuro. Es natural, pero también puede ser perjudicial para nuestro autocontrol. Podemos mejorar nuestro autocontrol centrándonos en el futuro inmediato.
El futuro inmediato es lo que vamos a hacer a continuación, no pasado mañana o la próxima semana. Deberíamos tratar de concentrarnos en lo que haremos en cinco minutos, diez minutos o incluso dentro de una hora. De esta forma podremos tomar decisiones más acordes con nuestros objetivos y valores que si estuviéramos mirando a un horizonte temporal mucho más largo.
5. Gestiona tus preocupaciones una vez al día
A menudo pensamos que las preocupaciones son una mala emoción. Sin embargo, es solo una emoción y se puede manejar. Es importante identificar la fuente del problema y luego tomar medidas para manejarlo.
Las preocupaciones son un tipo de emoción negativa que experimentamos en nuestra vida cotidiana. Nos causan estrés o ansiedad sobre posibles eventos futuros que nos puedan pasar a nosotros o a las personas que nos importan.
Hay multitud de formas para manejar las inquietudes, hoy os recomendamos tomar papel y lápiz, sentarse al final del día y escribir y pensar sobre lo que nos preocupa. Esto nos proporcionará una mayor tranquilidad.
6. Toma buenas soluciones en los peores escenarios
Las emociones son parte de nuestra vida cotidiana. También son una parte importante de nuestro proceso de toma de decisiones. Para tomar buenas decisiones, necesitamos poder controlar nuestras emociones, pero ¿cómo hacemos eso?
Hay muchas maneras en las que podemos controlar nuestras emociones. Para plantear estas soluciones, debemos tratar de descubrir la causa raíz de nuestros sentimientos negativos y hablar de ellos con alguien, otra opción también es, simplemente tratar de distraernos haciendo algo que nos haga feliz.
7. Busca una vía de escape
Todos tenemos necesidades emocionales que necesitan ser satisfechas. Necesitamos encontrar vías para escapar y drenar. La forma en que manejamos las emociones es una decisión personal.
Algunas personas prefieren estar solas, mientras que otras pueden querer salir y hacer algo con amigos o familiares. A algunas personas les gusta leer, mirar televisión o escuchar música, mientras que otras prefieren actividades físicas como deportes o ejercicio.
Es importante para nosotros, como individuos y como sociedad, que sigamos encontrando formas de lidiar con nuestras emociones de manera saludable.
Cuídate mucho. ¡Tu cuerpo y tu salud te lo agradecerán!